Escribir es un acto de plena libertad
Escribir es un acto de libertad en estado puro. Nadie es más libre que aquel que puede escribir lo que quiere expresar, sin tener que dar cuentas a nadie más que a él mismo.
Hoy, en un momento en que la literatura publicada se ha democratizado, gracias a Amazon, nos encontramos con una inmensidad de escritores impresionante. Todo el mundo escribe o dice escribir. Ahora es muy sencillo editar un libro y sentirse escritor, algo que es positivo, porque hace sentirse bien a mucha gente. No obstante, no debemos confundir escribir un libro con pensar que lo que se ha escrito merece ser leído por alguien más que por nosotros mismos.
Es muy difícil hacerse un hueco y darse a conocer en un mercado tan saturado como este. Los escritores desconocidos tenemos un camino sumamente complicado, porque las editoriales tradicionales ya tienen sus carpetas llenas con escritores reconocidos, por lo que es casi imposible conseguir abrirse una pequeña puerta en alguna de ellas.
Hasta hace poco pensaba que los premios literarios eran una posible vía para llegar a tener un pequeño empujón hacia el éxito. Esta esperanza se ha visto truncada en los últimos años al ver como novelas mediocres o simplemente malas eran galardonadas con los más importantes laureles de la literatura hispana. No obstante, tengo presentada mi tercera novela a los premios Alfaguara. Nunca he tenido la esperanza de ganar, sino de conseguir que algún editor profesional lea mi novela inédita y se interese por ella.
Perdida la esperanza de conseguir abrir brecha por ese lado, pienso que la única manera de poder llegar a más lectores es la perseverancia, la mejora constante y seguir el consejo de los profesionales.
Los escritores como yo, si queremos mantener la esperanza de llegar a trascender, tenemos que luchar día a día, acercarnos a los lectores y "ser pesados". En ese camino estamos. Presentar mi obra literaria en pueblos, asociaciones, bibliotecas, institutos es una buena opción para hacer que esa lluvia fina vaya calando cada vez en más gente.
Hay dos cosas con las que disfruto sobre todas las demás, estas son: escribir mis historias y presentarlas al público. Dicen que hablo con pasión de mis novela, es cierto. Esa pasión nace de saber que lo que escribo es honesto y expresa lo que yo quiero transmitir a los demás.
A pesar de los sinsabores de este camino tan tortuoso, seguiré fuerte y con la mirada siempre puesta en conseguir el éxito. Sé que llegará, pero también sé que no será fácil.
Desde este rinconcito que es mi blog, os doy las gracias a todos los que habéis leído esto, porque me habéis demostrado que me seguís y que lo que escribo merece la pena.
Gracias de corazón.